Setenta y dos librerías se han visto obligadas a cerrar sus puertas en 2011 en el Reino Unido, aunque paradójicamente se abrieron cincuenta y siete nuevas, según los resultado de un estudio realizado por la empresa PwC del que se ha hecho eco el periódico digital The BookSeller.
Según el estudio, el año pasado cerraron catorce tiendas por día en el Reino Unido de promedio. Entre los sectores más afectados figuran librerías, tiendas de electricidad, muebles, ropa de hombre, franquicias, bares, pubs y agencias de viaje, de acuerdo con la investigación. Por primera vez, los minoristas mostraron una disminución neta de 0,25 por ciento, a partir de un incremento neto del 1,2 por ciento en 2009.
De acuerdo con la opinión de Mike Jervis, especialista en el sector minorista que trabaja para esta empresa, una de las razones por las que las librerías están desapareciendo de las calles comerciales, es porque este sector cuenta con demasiadas tiendas repartidas por toda la ciudad y contratos de arrendamiento por períodos muy extensos, lo que resulta inapropiado en la actual fase de crecimiento económico.
Mike Jervis sugiere a los minoristas que hagan frente a la realidad y formulen un plan estratégico con los propietarios que les alquilan los locales. Tanto las librerías como las tiendas de electrónica, apunta Jervis, sufren también el crecimiento que han experimentando últimamente las compras a través de internet.

La Asociación de Libreros del Reino Unido envió un comunicado a todos los ayuntamientos solicitando una disminución de los impuestos para estos negocios, además de pedir una reducción del precio de los aparcamientos para facilitar el acceso a las librerías que estén en las calles principales de las ciudades.
Su director ejecutivo, Tim Godfray, hizo un llamamiento a una acción dinámica e innovadora por parte de los ayuntamientos “a partir de la nueva legislación que se presentará en breve, las autoridades locales contarán pronto con la flexibilidad necesaria para introducir tarifas locales y descuentos a los negocios. Esta reducción de impuestos será de gran ayuda para los libreros para poder equilibrar las diferencias resultantes de vender en las calles principales y de los minoristas de Internet”.