The Publishers Association [Asociación de Editoriales del Reino Unido] ha pedido al gobierno británico la abolición del veinte por ciento del IVA sobre los libros electrónicos. La presión se ejerce sobre el ministro de Economía, George Osborne, para que extienda el tipo cero aplicado a los libros impresos a las ediciones digitales.
Según informa The Bookseller, The Publishers Association ha afirmado que necesita "medidas urgentes" para reducir los tipos del IVA, ya que el mercado de libros electrónicos crece "exponencialmente". También ha declarado que los libros electrónicos deben ser tratados "igual" que los libros impresos, ya que aportan los mismos beneficios educativos, culturales y sociales. Asimismo, la organización también ha subrayado que los e-retailer (minoristas online) del Reino Unido estarían en mejores condiciones para competir con otras empresas que operan en países de la Unión Europea, como Francia y Luxemburgo, que se han rebelado contra la legislación comunitaria de establecer una tasa de IVA sobre los libros electrónicos del cinco y del tres por ciento respectivamente.
La Asociación de Libreros (Booksellers Association) del Reino Unido también ha realizado campañas en contra de las tasas diferenciales de IVA que, desde comienzos de 2012, han otorgado a Amazon, compañía que vende libros electrónicos fuera de Luxemburgo, una ventaja competitiva sobre los precios en relación a otros vendedores de libros electrónicos.

Richard Mollet, director ejecutivo de The Publishers Association, ha manifestado que la organización sostiene que existen sólidos argumentos para reducir los tipos del IVA en los libros electrónicos y alinearlos con la tasa cero de que gozan los libros impresos en Reino Unido. Mollet señala asimismo que otros países ya han reducido los tipos del IVA que se aplican a los libros electrónicos, y por eso creen que el Reino Unido podría y debería hacer lo mismo.
En 2015 una directiva de la Unión Europea invertirá la manera de aplicar el IVA sobre los libros electrónicos, lo que significa que la empresa suministradora tendrá que aplicar la tasa del país del cliente, similar a la forma en que se opera para los productos físicos.
Mollet añade que aguardar hasta 2015, cuando los cambios en el régimen del IVA sean implementados, supone esperar demasiado para los minoristas de libros electrónicos británicos. Y agrega: “si el gobierno no toma medidas ahora, pedimos que nos apoyen en Europa de cara a modificar la directiva sobre el IVA para que todos podamos disfrutar de los beneficios de los tipos reducidos aplicados a los libros electrónicos".
Cabe recordar que la Asociación de Editores de Diarios Españoles (AEDE), la Federación de Gremios de Editores de España (FGEE), y la Asociación de Revistas de Información (ARI) ya solicitaron al Gobierno español la aplicación de IVA cero a libros, periódicos y revistas tanto impresos como digitales. Asimismo, los editores españoles pidieron que se corrigiera la diferencia del IVA que grava con un cuatro por ciento las obras impresas y con un dieciocho por ciento las digitales.