Las ventas de libros de las categorías infantil y juvenil en los Estados Unidos han experimentado un espectacular crecimiento del sesenta y nueve por ciento en los de tapa dura y de un sesenta y dos por ciento en la edición de bolsillo, según un informe realizado por la
Association of American Publishers (APP) sobre los ingresos netos de las ventas de enero de 2012.
Jason Boog, en un artículo publicado en
GalleyCat, recoge algunas de las cifras.
Así por ejemplo:
Las ventas totales aumentaron en un veintisiete por ciento, y pasaron de casi trescientos millones de euros en enero del 2011, a más de trescientos setenta y ocho millones este año.
Así como la literatura infantil y juvenil ha experimentado un fuerte crecimiento en su versión en papel, los libros electrónicos en estas categorías han registrado un aumento del cuatrocientos setenta y cinco por cien desde el pasado año hasta hoy.
Algunos editores creen que esto se debe a la cantidad de opciones digitales que aparecen continuamente destinadas a este sector específico de la población.