Alan S. Cohen, vicepresidente de Mobility Solutions en Cisco, considera que la literatura de ficción es un estímulo de gran importancia para los emprendedores en un artículo publicado en Readwrite. Esta idea también es avalada por el profesor de psicología Keith Oatley de la Universidad de Toronto quien a su vez está convencido de que leer ayuda a eliminar toda la negatividad que mina la imaginación.
Cuando Cohen se lanzó a su primer proyecto, que fue el de escribir una novela, descubrió que aunque al final no obtuvo el éxito esperado esa iniciativa podía extrapolarla a futuros proyectos. En su opinión, embarcarse en una disciplina creativa obliga a cualquier persona a observar el mundo como un lienzo en blanco cada día, a confiar en el poder de la imaginación, algo que debe hacer todo aquel que se decida a crear una startup.

En el artículo, Cohen hace especial hincapié en resaltar el papel que cumplen las novelas de ficción para este fin y no tanto las películas. Ya que mientras las segundas suponen un escape de la realidad, la lectura o la escritura de ficción es lo más parecido a un software para la mente.
Esta teoría la corrobora el profesor de psicología de la Universidad de Toronto Keith Oatley, quien en su libro Such Stuff as Dreams: The Psychology of Fiction [De la misma sustacia que los sueños: La psicología de la ficción], demuestra, tras una ardua investigación, que leer ficción ayuda a eliminar cualquier elemento negativo que socave la imaginación. De esta manera, la capacidad de cambiar una forma de pensar que vaya más allá de la mera aceptación de un conocimiento convencional, es un factor de éxito a la hora de crear una compañía innovadora.
Por tanto, concluye, en lugar de que el momento del descanso el personal de la empresa lo dedique a tomarse un café, quizá sería más fructífero que se enfrascaran en una historia de ficción que los aleje de la monotonía y el flujo incansable de información que llega desde las pantallas.