Bélgica ha diseñado un plan, que lanzará oficialmente el 28 de febrero de 2015, con motivo de la Feria del Libro de Bruselas, para promover la cultura y adaptar su evolución a las políticas culturales de la sociedad tanto en relación con la revolución digital como con la interculturalidad o la diversidad.
Según la información proporcionada por Gary Nicolas, en
ActuaLitté, la operación, bautizada
Bouger les lignes [Cambiar las cosas] es una iniciativa de la Federación Valonia-Bruselas para promover la cultura de los ciudadanos.
La ministra de Educación Obligatoria, Edificios escolares, Primera infancia y Cultura de Bélgica, Joëlle Milquet, ha señalado que el plan se articulará en torno a tres puntos centrales.
- Implementar una nueva oferta cultural. Según declaraciones de la ministra, Bélgica ahora debe poner el objetivo en el artista y la creación en vez de hacerlo en la institución, como venía haciéndose.
- Apoyar las nuevas demandas y el acceso a nuevos públicos, es decir, preparar una verdadera política de diversidad y democratización adaptada a los nuevos retos.
- Construir una nueva gobernanza y establecer un nuevo paisaje cultural, simplificado y optimizado, coordinado, abierto.
En recientes declaraciones, Joëlle Milquet afirmó que el Gobierno debe acompañar la revolución digital a la que se enfrenta actualmente la industria del libro. Aseguró que para ello no se opondrá el libro impreso al libro digital, sino que se trabajará su complementariedad, "sin olvidar nunca –dijo– que se trata de la calidad de los contenidos, no de su embalaje, que ahora es lo preponderante".
Para acompañar mejor la implementación del plan, la Ministra pidió a los profesionales del libro, "una cooperación prospectiva y pragmática en un momento preciso sobre el eje de los cambios que se presentan".
También aseguró que se fomentará la evolución de bibliotecarios y bibliotecas, que todavía son los principales referentes de la lectura, para ayudarlos a romper barreras, con inversiones para innovación y apertura a nuevos modos de lectura, incluyendo pantallas.
Gary Nicolas asegura que lo que está en el juego es la plataforma de libros digitales para bibliotecas, Librel, tanto como el programa "Escritores en el aula" para devolver el libro a la corazón del aprendizaje.