La generación de los millenials empieza a consolidarse como unos lectores que van a impulsar una relación con los libros diferente a la tradicional. Esta es la tesis mantenida por la influyente empresaria argentina Viviana Zocco en Readmagine y recogida por la periodista Alba Casas en El País: ‘Todavía tienen una relación emocional con el libro en papel’, pero lo considera algo en extinción: ‘Los millennials son una generación que se comunica y consume de manera diferente´.

 

Zocco defendió el aprendizaje de experiencias de otros sectores que Readmagine puede ofrecer a la industria del libro: ‘no tiene sentido cobrar según el número de páginas, ofrecer un contenido más personalizado a un precio asequible puede ayudar en la lucha contra la piratería. Y lo compara con el mundo de la música: la gente ya no quiere pagar por un CD de 12 temas de los que solo escucha dos. Por eso triunfó iTunes.’

 

En este sentido El País recoge la idea de Luis González -Director General de la Fundación Germán Sánchez Ruipérez- en cuanto a la posibilidad de experimentar en el campo de los ebooks con dinámicas de la industria de los videojuegos, como puede ser la posibilidad de probar antes de pagar por el contenido, mediante la transición hacia sucesivos esquemas de pago.

 

Por otra parte, los datos aportados por Arantza Larrauri de Libranda en Readmagine muestran que la demanda de libros electrónicos en español aumentó un 24% el año pasado, según ese mismo documento. De este crecimiento, el 31% se produjo en América Latina, y más de la mitad solo en México. También Luis González y Viviana Zocco coincidieron en que serán los usuarios quienes decidan los soportes que van a preferir para cada experiencia o finalidad de la lectura.

 

El propio González ha participado como consultor internacional del Comité Técnico de la Primera Encuesta Nacional de Consumo y Medios Digitales entre Jóvenes de México y en ella se aprecia el peso creciente de los smartphones como soporte de lectura entre los más jóvenes (es un trabajo de BBY México/A leer publicado en 2016). Según los datos de este estudio el 89% de los jóvenes tiene un Smartphone con el que accede a internet para realizar actividades relacionadas con la comunicación, las interacciones con otros, el ocio y la lectura.

 

Los datos encontrados en la encuesta discuten la afirmación de que los mexicanos no leen: ‘porque tradicionalmente la métrica para esta afirmación se basa en el número de libros o ejemplares de materiales de lectura que se consumen; la encuesta deja ver con claridad que actualmente el consumo de materiales de lectura es una práctica cotidiana entre los jóvenes, quienes tienen ahora una mayor capacidad de elección de sus contenidos con base en sus intereses, pero que probablemente son contenidos más efímeros y más breves’.