Los adolescentes leen eBooks pero no reniegan del libro en papel: reportaje en el diario Público
Los adolescentes entre 13 y 18 años todavía nadan entre dos aguas: leen en digital pero no quieren dejar atrás el papel y forman parte del 47,8 por ciento de lectores mayores de 14 años que leen libros electrónicos. Estos datos aparecen en el reportaje realizado por Paula Corroto, que publica el diario Público en su edición del 11 de marzo de 2011, como avance de los resultados de la segunda fase de la investigación sobre la lectura en soporte digital realizada por la Fundación Germán Sánchez Ruipérez en el marco del proyecto Territorio eBook.
Los adolescentes entre 13 y 18 años todavía nadan entre dos aguas: leen en digital pero no quieren dejar atrás el papel y forman parte del 47,8 por ciento de lectores mayores de 14 años que leen libros electrónicos.
Estos datos aparecen en el reportaje realizado por Paula Corroto, que publica el diario Público en su edición del 11 de marzo de 2011, como avance de los resultados de la segunda fase de la investigación sobre la lectura en soporte digital realizada por la Fundación Germán Sánchez Ruipérez en el marco del proyecto Territorio eBook.
La periodista, en el artículo que titula "La generación digital que ama el papel", reproduce los testimonios de tres de los cuarenta adolescentes entre 13 y 18 años que han participado en esa segunda fase del estudio: Lucia Fierro, Ana Roux y Lucio Adansa. Todos son socios de la biblioteca y se consideran buenos lectores (unos cincuenta libros al año) y sólo hace unos meses han comenzado a leer en dispositivos electrónicos. "La experiencia de la tableta iPad supuso una nueva experiencia estimulante" -dice Adansa- que participó en el experimento de leer en iPad la obra El joven Lennon, una biografía novelada del integrante de los Beatles, del escritor Jordi Sierra i Fabra como parte del proyecto Territorio eBook.
Luis González, director general adjunto de la Fundación, resalta la fascinación de los adolescentes por el soporte digital y destaca que lo usan para leer "pero también para comunicarse, jugar, escuchar música... El libro electrónico tiene un uso multidisciplinar para ellos" –señala.
"Ellos ahora hackean la lectura. Se mueven en distintas pantallas, hacen dibujos y navegan por hipervínculos, juegan mucho" –destaca. Sus consideraciones sobre los indicios que se han recogido en el trabajo con adolescentes quieren subrayar el proceso de cambio en el que estamos y la incertidumbre con la que ha de moverse aún cualquier proyecto de innovación como el que ha puesto en marcha la fundación en 2009.
Rafael Muñoz, del Centro Internacional del Libro Infantil y Juvenil (CILIJ) de la Fundación en Salamanca, tutor de Lucio, Ana y Lucía, corrobora que los adolescentes saltan de un soporte a otro con gran facilidad, pues nacieron con internet y no tienen problemas para bucear entre navegadores y programas. No obstante, advierte que "hay que tener cuidado a la hora de etiquetarlos como nativos digitales, porque eso tampoco significa que tengan una relación profunda con las nuevas tecnologías".
Estas son algunas de las primeras conclusiones que surgen de la investigación realizada por la Fundación y que adelanta el diario Público cuyos resultados serán publicados en unos meses.
El reportaje de Paula Corroto también aporta datos del Barómetro de Hábitos de Lectura publicado por la Federación de Gremios de Editores de España y una encuesta sobre qué géneros se leen más en soporte digital realizada por la empresa Conecta.
Adjunto se puede leer el reportaje completo en pdf.
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