Uclés: la dinámica de una biblioteca pública en un municipio de 246 habitantes
La Biblioteca Municipal de Uclés (Cuenca) es una de las mil ciento noventa que hay en España en municipios de menos de dos mil habitantes. De hecho, este pequeño municipio presente en la historia desde tiempos remotos tiene solo doscientos cuarenta y seis habitantes, según el último censo. Mientras sigue abierto el debate sobre la conveniencia de mantener en funcionamiento instalaciones bibliotecarias para una población tan escasa en lugar de que por ejemplo un servicio de bibliobús agrupe las necesidades de varios pueblos de la comarca, el club de lectura de la Biblioteca de Uclés ha clausurado su séptimo ciclo anual.
La Biblioteca Municipal de Uclés (Cuenca) es una de las mil ciento noventa que hay en España en municipios de menos de dos mil habitantes. De hecho, este pequeño municipio presente en la historia desde tiempos remotos tiene solo doscientos cuarenta y seis habitantes, según el último censo.
Mientras sigue abierto el debate sobre la conveniencia de mantener en funcionamiento instalaciones bibliotecarias para una población tan escasa en lugar de que por ejemplo un servicio de bibliobús agrupe las necesidades de varios pueblos de la comarca, el club de lectura de la Biblioteca de Uclés ha clausurado su séptimo ciclo anual.
En marcha desde 2004, solo un año después de la inauguración de la Biblioteca municipal, este club de lectura está compuesto por ahora por un grupo de una veintena de mujeres, con una media de 60 años.
El club está coordinado por María Teresa Sans, la responsable de la biblioteca pública municipal de Uclés, que forma parte de la Red de Bibliotecas Públicas de Castilla-La Mancha y que pertenece al Ayuntamiento.
Las mujeres que ahora acuden con regularidad al club de lectura no tenían el hábito de leer antes de apuntarse a esta actividad de la biblioteca y el grupo se ha ido ampliando con los años, incluso con la asistencia de vecinas del pueblo que ya no viven en él, animadas por los buenos resultados logrados en conjunto. Algunas mujeres no sólo no tenían el hábito de leer antes sino que tenían dificultades para leer, escribir o expresarse que han ido superando y corrigiendo al cabo del tiempo.
Las integrantes del club admiten que en parte han superado sus miedos y dificultades gracias a la propia dinámica del grupo y al empeño de la bibliotecaria que, aparte de proponer los libros, se ocupa de organizar actividades como conferencias y charlas para contextualizar mejor las lecturas. Por ejemplo, cuando leyeron La joven de la perla, y La sonrisa etrusca el artista plástico Luis Serrano fue a la biblioteca a hablar de Vermeer y de arte etrusco, respectivamente.
También vieron las películas respectivas cuando leyeron La dama de las camelias o El rey pasmado, que además, se rodó en Uclés con figurantes de la localidad. En la biblioteca, en 2010, se hicieron veintiuna actividades, trece para niños y ocho para adultos, y se prestaron quinientos cuarenta y dos libros de literatura infantil y juvenil y setecientos noventa y dos de adultos.
Las tareas de María Teresa Sans en la biblioteca de una localidad afectada por el despoblamiento, donde no hay escuela pública –aunque hay algunos niños– muchas veces no consisten solo en brindar los servicios básicos propios de la institución cultural. De hecho, habitualmente supervisa las tareas escolares de algunos niños de la localidad que vienen a hacer los deberes al acogedor espacio de la biblioteca.
En la Biblioteca, además de ofrecer los servicios básicos como el préstamo de libros, información, lectura de libros en sala, prensa y revistas, o servicio de conexión gratuita a internet, también realiza actividades para todos los públicos en un intento por enriquecer la vida cultural y social de sus habitantes. Con esa intención, la Biblioteca organiza talleres y cuentacuentos para niños y adultos, aparte del taller de lectura y otro de escritura, excursiones, concursos, pases de películas, o la celebración del Día del Libro.
María Teresa Sans está convencida de que en Castilla-La Mancha y en particular en la provincia de Cuenca, "hay un ejército de bibliotecarias, y algún bibliotecario también, que hace su trabajo con pasión y vocación" a pesar de las dificultades. Sin ir más lejos, este año no han recibido la ayuda de la Junta de Castilla-La Mancha que hasta ahora permitía no solo pagar el contrato de la bibliotecaria sino realizar adquisiciones bibliográficas y actividades. Por tanto el mantenimiento de la Biblioteca actualmente está cargo del Ayuntamiento de la localidad, lo que ha impedido la realización de actividades contratadas a terceros (cuentacuentos, talleres) y ha hecho posible la compra solo de algunos libros.
No obstante las dificultades, el jueves 15 de diciembre de 2011 el club de lectura celebró su particular fin de curso por séptimo año consecutivo. En esta oportunidad contaron con la colaboración de Mariángeles Fernández, de la Fundación Germán Sánchez Ruipérez, que coordinó el taller de lectura del cuento de Julio Cortázar “Cartas de mamá”.
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