Penguin finalmente llega a un acuerdo por la fijación de precios

Penguin ha anunciado que finalmente ha llegado a un acuerdo con los distintos Estados norteamericanos y las oficinas de consumidores en relación con el contencioso sobre la fijación de precios de libros electrónicos. El cierre acordado establece un pago de setenta y cinco millones de dólares, que el grupo editorial deberá reembolsar a los consumidores.

Penguin ha anunciado que finalmente ha llegado a un acuerdo con los distintos Estados americanos y las oficinas de consumidores en relación con el contencioso sobre la fijación de precios de libros electrónicos. El cierre acordado establece un pago de setenta y cinco millones de dólares, que el grupo editorial deberá reembolsar a los consumidores.

Según informa Andrew Albanese en una nota publicada en Publishers Weekly, se despeja así la cuestión de si la editorial Penguin se sentaría en el banquillo de los acusados en la vista programada para el próximo tres de junio de 2013. De esta manera, tras los acuerdos precedentes a los que llegaron las otras editoriales implicadas, parece ser que será Apple en solitario la que se persone para ejercer su defensa ante los tribunales.

El acuerdo de Penguin, que aún debe ser aprobado por el tribunal a cargo del caso, supone el mayor desembolso de los establecidos hasta la fecha para los grupos editoriales implicados. La cantidad que tendrá que abonar Penguin, destaca Albanese, es el triple de la acordada para Macmillan, que se cifró en veintiséis millones de dólares; e incluso resulta superior al montante del conjunto de lo aceptado ya por Simon & Schuster, Hachette y HarperCollins, que asciende a los setenta millones de dólares.

Tras este nuevo paso de Penguin, el fondo de liquidación que finalmente esta editorial reembolse a los consumidores supondrá el doble del inicialmente establecido en 2012, cuando se anunció que los cinco editores demandados deberían hacer frente en su conjunto a un pago aproximado de 165 millones de dólares, expone Albanese en su nota.

El reparto final de esa cantidad establecida para el conjunto, y que deberán abonar al Estado y a los consumidores las editoriales implicadas en la denuncia sobre la fijación de precios, queda establecido, según Albanese, de la siguiente manera: Penguin, setenta y cinco millones de dólares; Macmillan, veinte; Hachette, treinta y dos; HarperCollins, veinte; y Simon & Schuster, dieciocho millones de dólares.
 

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