El Departamento de Protección al Consumidor del estado de Connecticut ha presentado un informe sobre la situación del mercado de los libros electrónicos en las bibliotecas públicas y recomienda esperar y ver cuál es su evolución.
Este Departamento ofrece en su estudio tres recomendaciones, según informa Andrew Albanese en un artículo publicado en Publishers Weekly:
El informe recoge las principales subidas y bajadas del mercado de los ebooks en las bibliotecas –explica Albanese– y aunque se ha podido comprobar que se mueve en una dirección bastante positiva, existen dos áreas de preocupación: el precio y la propiedad.
También se tuvo en cuenta –continúa el artículo– el coste que podría suponer la adquisición y mantenimiento con uno o más distribuidores de contenido electrónico y se puedo comprobar que una parte de los presupuesto de la biblioteca tendría que dedicarse a dicho contenido.
Por lo tanto, el Estado ha decidido mantenerse a la espera, ya que existen claras muestras de que en un momento, no muy lejano, se llegará a un equilibrio en el mercado que se traducirá en un nivel aceptable de disponibilidad de ebooks en las bibliotecas públicas.