Los libros enriquecidos no acaban de encontrar su lugar en el sector y hay quien señala que la razón podría estar en la falta de un mercado real para este tipo de productos. Pero según ha manifestado el consultor en edición digital Peter Constanzo en su blog BookCurrents, la verdadera razón es lo difícil que lo tienen las editoriales para lanzar un libro de estas características en todas las plataformas digitales.
Si los editores no pueden distribuir sus ebooks enriquecidos en todos los canales, estos nunca podrán conseguir que se hable de ellos, se reseñen o se ofrezcan promociones –señala Constanzo.
Con esto, este consultor no sugiere que se tire la toalla o dejar de empujar esta forma de narración digital. Ya hay empresas que se han decidido a mejorar y facilitar la salida y alcance de estos libros. Apple espera que en breve todos estos proyectos puedan visualizarse sin problema y de forma sencilla en sus dispositivos. Comixology parece que quiere apostar por hacer la lectura más dinámica e interactiva en Kindle Fire.
Por supuesto no quiere decir que todos los libros electrónicos deban de ser enriquecidos. Tres años y medio después de la Feria del Libro de Londres en la que se habló sobre esta nueva forma de narración, se sabe que la gente prefiere en su mayoría leer un texto, simple y llanamente, no quiere estas mejoras. Pero Constanzo está convencido de que si se superan los retos de distribución que hay en estos momentos y los libros enriquecidos llegan a todos los lectores, estos podrán determinar lo que quieren o no quieren, una vez que conozcan y sean conscientes de lo que se estaban perdiendo.