Claves para optimizar el contenido digirido a la Generación Y
El analista Joe Wikert considera que el contenido dirigido en concreto a los millennials, también conocidos como Generación Y, necesita una optimización, ya que, probablemente, no esté cumpliendo con las necesidades y expectativas de las nuevas generaciones.
El analista Joe Wikert considera que el contenido dirigido en concreto a los millennials, también conocidos como Generación Y, necesita una optimización, ya que, probablemente, no esté cumpliendo con las necesidades y expectativas de las nuevas generaciones.
A través de su web, reflexiona el hecho de que muchas organizaciones llevan utilizando desde hace años la misma estrategia y modelo de negocio y aunque hayan adoptado las últimas tecnologías o dispositivos es muy probable, en opinión de Wikert, que no estén teniendo en cuenta aspectos fundamentales para conectar con los jóvenes nacidos con el milenio.
Para ello, ofrece cuatro puntos clave a considerar y entre lellos están:
- Propiedad. Steve Jobs sugirió que los consumidores querían ser dueños de su música y no alquilarla, pero los tiempos han cambiado –opina Wikert- y las nuevas generaciones han crecido con Spotify y Pandora, por lo que están acostumbrados a alquilar el contenido. Y si esto es lo que hacen con la música, Wikert se plantea el por qué habría que pensar que van a querer se dueños de un libro que solo van a leer una vez. Está convencido de que el alquiler de contenidos crecerá mucho más gracias, en gran parte, a los Millennials.
- Consumo. El consumo de contenido en formato corto es cada vez más popular –comenta Wikert- ya sean las actualizaciones de estado en Facebook o un tuit de 140 caracteres. Está seguro de que aquellos editores especializados en contenido de formato largo deberán asegurarse de contar con un modelo y unos productos que atraigan a estos jóvenes.
- Valor. Según una encuesta realizada recientemente, esta nueva generación de jóvenes espera que el contenido sea gratuito, a lo que Wikert añade, que una de las causas de que no den valor al contenido digital podría estar en los editores, ya que sus ofertas digitales son simplemente una adaptación de la edición impresa sin ninguna otra funcionalidad.
- Privacidad. La mayoría de los defensores de la privacidad tiene canas –comenta Wikert. Nadie menor de veinte años se ha quejado de este tema. Han crecido con las herramientas sociales, por lo que son mucho más liberales cuando se trata de compartir actualizaciones y contenido.
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