El laboratorio publica su documento sobre neurociencia y lectura
A lo largo de 2017 la Fundación Germán Sánchez Ruipérez (FGSR) ha llevado una serie de reuniones de trabajo centradas en la identificación y caracterización de desafíos que afronta el fomento de la lectura y en la búsqueda de respuestas eficaces. A esta línea de trabajo se la ha denominado Laboratorio Contemporáneo de Fomento de la Lectura (LCFL) y se ha basado en la colaboración entre el equipo de la Fundación y diversos especialistas en libro y lectura, así como profesionales de otros campos.
El proceso de documentación se culminó con la conferencia que impartió en noviembre de 2017 el Doctor Ezpeleta, inquieto neurólogo de la Sociedad Española de Neurología y de la Fundación del Cerebro.
El laboratorio publica
un documento sobre
neurociencia y lectura
Primer documento descargable del Laboratorio Contemporáneo de Fomento de la Lectura
Vídeo completo de la conversación entre Ezpeleta y Basanta
A lo largo de 2017 la Fundación Germán Sánchez Ruipérez (FGSR) ha llevado una serie de reuniones de trabajo centradas en la identificación y caracterización de desafíos que afronta el fomento de la lectura y en la búsqueda de respuestas eficaces. A esta línea de trabajo se la ha denominado Laboratorio Contemporáneo de Fomento de la Lectura (LCFL) y se ha basado en la colaboración entre el equipo de la Fundación y diversos especialistas en libro y lectura, así como profesionales de otros campos.
El proceso de documentación se culminó con la conferencia que impartió en noviembre de 2017 el Doctor David Ezpeleta, inquieto neurólogo de la Sociedad Española de Neurología y la Fundación del Cerebro.
La lectura genera una reserva cognitiva
La primera idea que se puede retener de este documento es que la actividad de la lectura genera una reserva cognitiva que puede ser crucial para prevenir o mitigar la degeneración neuronal y las enfermedades que se relacionan con ella.
En segundo lugar, el efecto beneficioso de la lectura se multiplica cuando se produce en una dinámica de socialización, es decir, si las lecturas se comparten.
Si se ha afirmado que a través del ejercicio de ciertas actividades –entre las que destaca la lectura- ‘llevamos la contraria a la naturaleza’ (Ezpeleta) porque se van creando continuamente nuevas sinapsis, esto implica que una nueva forma de ver el fomento de los hábitos lectores tiene todo el sentido. Esta nueva concepción no es excluyente de otras, aunque supone diseñar proyectos de fomento de la lectura desde los objetivos propios de la salud pública, más que los derivados del artículo 44 de la Constitución (promoción de la cultura).
Transformar las políticas públicas de lectura
La vinculación de la lectura a la salud cerebral puede ser útil para elevar el nivel de prioridad y de dotación de medios al fomento de la lectura entre las muy diversas actuaciones previstas en las agendas de políticas públicas.
El fomento de la lectura debería salir, de una vez por todas, del ámbito cerrado de la promoción cultural y sería coherente que los departamentos de cultura de las distintas administraciones públicas utilizaran como argumento para elevar el nivel de priorización de las estrategias de lectura y encontrar el modo de dotar económicamente programas que recojan los efectos beneficiosos del ejercicio lector y se inserten en el mismo centro de la política de salud.
La propuesta que está implícita en este documento es la de integrar partidas (y por lo tanto actuaciones) recurrentes de los presupuestos dedicados a la atención a la tercera edad, salud preventiva y promoción de la salud (todos dentro del bloque de políticas sociales) y que se dediquen al lanzamiento de una estrategia de lectura desde los objetivos propios de estas políticas.
Inserción del LFCL en el III Plan de Fomento de la Lectura
El Laboratorio Contemporáneo de Fomento de la Lectura (LCFL) nace como una propuesta de la FGSR para la creación de nuevas ideas y líneas de trabajo en el contexto de la estrategia de promoción del hábito de la lectura en la sociedad que pone en marcha el III Plan de Fomento de la Lectura (MECD). De hecho, el LCFL cuenta con la financiación de la ayuda de Promoción de la lectura, que otorga la Dirección General de Industrias Culturales y del Libro del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte.
El LCFL trabaja tanto en el centro de las preocupaciones tradicionales y específicas de este sector, como busca la exploración de nuevos ámbitos en colaboración de especialistas que manejan culturas y herramientas profesionales muy diferentes a las propias de la lectura.
El LCFL ha incluido en sus ejes de trabajo la exploración de la neurología como ámbito de inspiración para el diseño de estrategias y como mecanismo para el contraste de la utilidad de algunos proyectos de lectura. Hasta este punto el documento se debe casi totalmente a las ideas y enseñanzas que el Dr. David Ezpeleta que ha presentado en una conferencia (en forma de conversación con Antonio Basanta) durante el mes de noviembre de 2017 y el texto que ha elaborado para esa misma ocasión.