Barómetro: Se estabiliza el porcentaje de españoles que son lectores frecuentes

La Federación de Gremios de Editores de España ha presentado en el Ministerio de Cultura y Deporte el Barómetro de lectura con los datos de la investigación de la empresa Conecta (a la que la FGEE encarga de este estudio habitualmente).

 

Barómetro: Se estabiliza el porcentaje de españoles que son lectores frecuentes

 
 
·      El impulso de la lectura durante los confinamientos se mantiene.
·      El barómetro es pionero en la idea de una convergencia europea en estudios sobre hábitos de lectura.
 
La Federación de Gremios de Editores de España ha presentado en el Ministerio de Cultura y Deporte el Barómetro de lectura con los datos de la investigación de la empresa Conecta (a la que la FGEE encarga de este estudio habitualmente). 
 
La información más reseñable de 2021 es que se aprecia una consolidación del gran incremento de la proporción de españoles que indican que leen libros de forma frecuente, que se había producido en 2020 como parte del impacto de los meses de confinamiento en el hogar. 
 
La categoría de “lectores frecuentes” son aquellas personas que responden que leen libros en su tiempo de ocio, como mínimo, una vez o en más ocasiones. De esta manera se cuenta con una información sobre la cantidad de personas para las cuales la lectura es una práctica cultural relevante en su tiempo libre; el dato se ha estabilizado en el 52,7% de los encuestados.
 
Por otra parte, la lectura se ha mantenido como una actividad de ocio más para el 64,4% de la población española y la mejora de los índices de lectura se produce en la práctica totalidad de las comunidades autónomas y en la mayoría de los tramos de edad, así como en mujeres y hombres. A pesar de esto, se mantienen las grandes diferencias por territorios (por ejemplo, la comunidad de Madrid alcanza el 73,5% de su población, frente al 54,6% de Extremadura), o según la edad o el sexo.
 
Disminuye algo el porcentaje de lectores en formato digital -29,4% frente al 30,3% registrado en 2020, frente al aumento de la escucha de audiolibros, que pasa al 5,2%  desde el 3,1%.
 
En cuanto al módulo dedicado a la lectura de los menores de edad, cabe destacar que crecen las horas semanales dedicadas a la lectura entre los niños de seis años y hasta los 9, pero a partir de los 15 años se aprecia una disminución notable de la proporción de lectores frecuentes en tiempo libre.
 
En lo que respecta al estudio sobre la demanda de libros, los datos más relevantes del Barómetro de 2021 son que un 52,3% de los españoles compraron libros (no de texto) en 2021, 0,6 puntos porcentuales más que en 2020, que la librería tradicional se mantiene como principal canal para la compra y que aumenta algo la proporción de quienes pagan por los libros electrónicos (43%) pero la mayoría sigue realizando descargas gratuitas.
 
Convergencia europea en estudios sobre hábitos de lectura
 
La red europea Aldus Up (de la que forman parte la Federación Europea de Editores, la Fundación Germán Sánchez Ruipérez, la Universidad Johannes Gutenberg de Mainz, la Feria de Frankfurt o la de Bolonia, entre otras instituciones) tiene como uno de sus objetivos el lograr una convergencia europea en los estudios, dedicados a conocer y comparar el comportamiento lector en cada país de la Unión Europea.
 
Con esta meta se ha diseñado una metodología que permitiría contrastar los hábitos de lectura de los distintos países europeos; se denomina ERICS (EuRopean Item Core Set for reading surveys). 
 
Gracias a la colaboración de la institución española Fundación GSR -que lidera este tipo de proyectos en Aldus Up- se desarrolló en 2021 una reunión técnica con expertos de distintos países y de la FGEE con el fin de estudiar la metodología aplicada en España: la conclusión es que el Barómetro recogía casi la totalidad de los requisitos para servir de modelo para la citada convergencia.
 
La Federación de Gremios de Editores de España tomó la decisión de que nuestro Barómetro de 2021 fuera la primera aplicación de esta metodología de estudio en toda Europa. 
 

Otra de las fortalezas del estudio de la FGEE, considerada como modélica, es el grado de compromiso que supone la estabilidad del carácter anual con el que se hace esta investigación, lo que resulta casi insólito en la UE. 


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