En el entorno bibliotecario, el trato directo con el usuario es clave y, en el marco de este, la recomendación de lecturas de calidad es una de las funciones más importantes y valoradas. Para desarrollarla de forma efectiva es fundamental conocer bien el fondo pero, sobre todo, conocer bien al usuario.
En este sentido, el servicio de préstamo ofrece muchas oportunidades para:
· Orientar al lector en sus elecciones, mediante la señalización del fondo recomendado con iconos u otros elementos que identifiquen los títulos más destacados u ofreciendo selecciones de materiales reseñados en guías de lectura o páginas web pero, muy especialmente, a través del asesoramiento personalizado.
· Sorprender al lector con propuestas atractivas especialmente concebidas para él y que llamen su atención, como selecciones de lecturas para compartir en familia, lotes de libros para la escuela estructurados por ciclos educativos, temas curriculares, de actualidad, lecturas obligatorias, etc.; o selecciones de lecturas de temas de interés en distintos formatos, ubicadas en rincones o espacios bien señalizados y con un diseño llamativo (una selección de música que simula la carátula de un CD, un listado de películas a modo de fotogramas…).
· Comunicar al lector información en persona acerca de las novedades recibidas, los escritores e ilustradores que visitarán la biblioteca y otras actividades y talleres que puedan ser de su interés y promover el conocimiento y el uso del resto de canales de comunicación disponibles, como pueden ser la página web o los perfiles abiertos en redes sociales.