La Biblioteca Pública de Nueva York (NYPL) ha superado los mil millones de dólares de dotación por primera vez, pero según el presidente del comité de inversión de esta biblioteca, Sr Wachenheim, debería aumentar en otros cuatrocientos millones más para compensar los retrocesos sufridos en esta última década.
Esta donación, informa Jennifer Maloney en un artículo publicado en The Wall Street Journal, repercutirá en el emblemático edificio de la quinta avenida, en el Schomburg Center for Research in Black Culture del barrio neoyorquino de Harlem y en la Library for the Perfoming Arts en el Lincoln Center.

Esta inyección de dinero llega tras un período de cuatro años de retroceso en la inversión. Funcionarios de esta biblioteca –informa Maloney– han comentado que el sistema de investigación todavía no se ha recuperado de los recortes sufridos en los últimos diez años, algo que afecta de igual manera a otras instituciones culturales de la ciudad. Como resultado de esta falta de financiación, estos centros de investigación cuentan en estos momentos con menos personal y ofrecen menos exposiciones y servicios.
Los fondos –explica Wachenheim– los administran entre quince y veinte empresas distintas y están expuestos a la renta variable de muchas otras donaciones.
En la reunión que celebró la junta de administración –explica Maloney– el presidente de la biblioteca, Neil Rudenstine, dijo que están manteniéndose conversaciones con el alcalde de la ciudad, Bill de Blasio, quien ha solicitado una auditoría financiera del plan de renovación, pero en su opinión, y atendiendo a los indicios, parece que de momento se está muy lejos de que se tome la dirección adecuada.