La Unión Internacional de Editores (IPA) ha pedido a Europa que ponga fin a la discriminación en el tipo de IVA que grava los libros electrónicos, al considerarlo injusto y atrasado. Para esta asociación, es necesario un tratamiento coherente para todos los formatos, digital o papel, y asegura que la mejor manera para lograrlo es mediante la reducción de los impuestos en los ebooks.

Un estudio realizado por esta asociación muestra que la mayoría de los estados europeos aplican un tipo de IVA completo a los libros electrónicos y uno reducido a los de formato en papel. Esta anomalía, explica Joshua Farrington en un artículo publicado en The Bookseller, se debe a que la legislación comunitaria establece que los libreros están obligados a cobrar la tarifa completa en los libros electrónicos.
Países como Francia y Luxemburgo, en un “momento de rebeldía”, han decidido ir en contra de esta tendencia y aplican un impuesto reducido en los ebooks, lo que ha provocado que la Comisión Europea haya iniciado un procedimiento judicial contra ellos.
Libreros del Reino Unido hicieron un llamamiento para que se eliminase el IVA en los ebooks –añade Farrington– con el fin de proporcionar igualdad de condiciones a los minoristas del país. No se puede obviar –continúa– que empresas como Amazon y Kobo establecen su base legal en países como Luxemburgo para beneficiarse de los impuestos reducidos.
Jens Bammel, secretario general de la IPA ha dicho que el enfoque europeo actual "es un desastre, inconsistente, atrasado e injusto y supone un gran obstáculo en el camino hacia la migración digital. Con mercados como Brasil y México, en los que los ebooks están exentos de IVA, Europa corre el riesgo de quedarse atrás" –concluye.