Los libreros independientes británicos esperan que los consumidores penalicen a Amazon tras el documental emitido en este país en el que se mostraba las deficientes condiciones laborales que se dan en un almacén que tiene la compañía en el Reino Unido. Si embargo un analista pone en duda que esto pueda ocurrir.
La grabación la realizó un periodista infiltrado y en ella se puede comprobar que durante su jornada laboral debía recorre casi diecisiete kilómetros y recoger un pedido cada treinta y tres segundos. El experto Michael Marmot considera que estas condiciones de estrés pueden derivar en enfermedades físicas y mentales.
Sarah Shaffi publica un artículo en The Bookseller en el que recoge las declaraciones que han hecho diversos libreros independientes ante esta situación.
Peter Donaldson, propietario de la librería The Red Lion Bookshop en Colchester cree que algunas personas decidirán alejarse de Amazon de la misma manera que lo hicieron cuando saltaron a la luz las prácticas fiscales de la compañía. Los clientes –comenta– se lo pensarán dos veces antes de pulsar el botón de compra en la web.
Cuando se hizo pública la política fiscal del minorista, muchos clientes llegaron a su librería por que confesaban estar decepcionados. Es más –añade– parte de estas personas han acabado siendo clientes habituales.
Keith Smith, de Wakwich Books y Kenilworth Books, tiene la sensación de que la percepción del público está cambiando, sobre todo cuando el caso de los impuestos se hizo público. Confiesa que se ha encontrado con muchísima gente que manifiesta su intención de no volver a comprar algo en Amazon y de apoyar a las tiendas locales. También recibe mensajes de clientes que quieren que les suministre libros para no tener que adquirirlos a través del gigante minorista.
Sin embargo –informa Shaffi– Douglas McCabe de la empresa Enders Analysis predice que la emisión de esta grabación no tendrá ningún efecto en la recaudación navideña de la compañía, aunque recomienda a la empresa que atienda con sumo cuidado la opinión pública ya que su servicio se basa en la experiencia personal, además de en la comodidad y el precio. Por lo tanto –finaliza– la empresa debe estar atenta a que no cambien la percepción que han tenido hasta el momento los consumidores.