Como parte de un movimiento llamado Tech Timeout [Tiempo muerto tecnológico], una escuela de San Francisco (California) apagará sus dispositivos electrónicos durante tres días a partir del 12 de febrero y luego debatirá sobre la comprensión de los alumnos y sus familias sobre la dependencia tecnológica y evaluará los resultados.
Bajo el epígrafe Tech Timeout Academic Challenge, más de mil cien alumnos de primaria y secundaria del colegio Convent & Stuart Hall de San Francisco, una escuela que se enorgullece de acceso ubicuo a la tecnología, participarán en este programa innovador presentado por Foresters que desafía a los alumnos a cerrar sus dispositivos digitales por unos días y luego discutir o escribir sobre sus experiencias.
Será la primera escuela en el área de la Gran Bahía en participar en el reto aunque es la tercera en California.
En un artículo que publica TeachThoughtse indica que el colegio religioso Convent & Stuart Hall es el único que incluye en la experiencia a estudiantes de edades comprendidas entre cuatro a dieciocho años y abarca la tecnología provista por la escuela y los dispositivos personales como teléfonos móviles.
Los alumnos que participen entregarán sus móviles y asumirán por escrito un compromiso donde harán un listado de todas las tecnologías de las que estén de acuerdo en abstenerse. Los padres también pueden participar y recibirán un paquete familiar que pueden utilizar para contribuir al éxito del experimento.
"La participación es una pieza fundamental", ha dicho Howard Levin, director de Innovación Educativa y Servicios de Información del colegio.
Se espera que los alumnos participantes y sus familias puedan alejarse de la tecnología para tener una mejor comprensión de su dependencia. Tras el desafío, los estudiantes discutirán y evaluarán su experiencia "tech-libre" de cómo desconectarse.
"En cierto modo, el niño que falle tiene más posibilidades de ser reflexivo", opina Howard, ya que uno de los objetivos es "crear disonancia cognitiva entre los que se unen".
"Una escuela como la nuestra, que adopta un programa 1-a-1 necesita encontrar el equilibrio", dice Howard. "Necesitamos también ayudar a los estudiantes no sólo a que aprendan cómo usar la tecnología con sabiduría, sino la forma de reconocer de qué manera los dispositivos pueden utilizarse para tener conversaciones y relaciones reales".
El reto académico incluye videos, guías de discusión en el aula y actividades. Los profesores participantes recibirán una guía para ayudarlos a organizar propio reto en las aulas o en toda la escuela.
El reto Tech Timeout lanzado por Foresters en Norteamérica, anima a las familias participantes a desconectarse de todos los aparatos electrónicos con el objetivo de ayudar a cónyuges, padres e hijos a construir lazos más fuertes, comunicarse de manera más personal y participar más en la vida del otro.
Hasta la fecha, más de 16.000 estudiantes de toda América del Norte han participado en el reto.