Juan Fontanillas Moneo, orientador de Educación Secundaria en Valladolid, está seguro de que el cambio de paradigma educativo generado por la integración de las TIC en el aula impone la necesidad de que los docentes se transformen en gestores de contenidos y dejen de ser meros transmisores de conocimientos.
Después de ofrecer una conferencia sobre “Nuevos retos, nuevos contextos” en el X seminario del Consejo Escolar de Castilla y León que se celebró en la sede del Centro Internacional de Tecnologías Avanzadas de la Fundación en Peñaranda de Bracamonte, Fontanillas Moneo accedió a una entrevista que está disponible en el Canal Cita.
Fontanillas Moneo opina que actualmente los docentes se enfrentan a demasiados nuevos retos ya que la integración, más que la introducción, de las TIC en el aula “ha generado un cambio de paradigma educativo”.
En ese sentido, afirma que el gran reto que tienen que afrontar los docentes pasa por “cambiar nuestro paradigma de la clase magistral” y “hacer de mediadores” entre los contenidos y el alumno para que él interactúe mejor.
Hace notar que ha caducado el viejo modelo educativo con el que se ha venido trabajando en la escuela prácticamente desde la Revolución Industrial, basado en una dimensión económica para encontrar trabajo. “Ahora, además de educar para una dimensión económica, educamos para una dimensión social” –sostiene Fontanillas Moneo– ya que se fomenta una nueva forma de trabajo colaborativo, para el que se requiere una formación con intereses múltiples.
.gif)
A su entender ya no importa tanto conocer como saber hacer en equipo para conseguir una inteligencia mucho mayor que la que un ser humano puede tener individualmente y en ese sentido cree que los profesores tienen que cambiar su concepción docente. “Hasta ahora el profesor era un transmisor de contenidos, de conocimientos” y luego el alumno los memorizaba y los aprendía. En cambio hoy los contenidos se encuentran prácticamente en internet, en la red, en la nube, y por tanto el profesor ya no tiene que transmitirlos, sino mediar entre esos contenidos y el alumno y ocuparse de gestionarlos, administrarlos y organizarlos y hacer que el alumno trabaje y aprenda a generarlos.
Fontanillas Moneo se refirió, entre otras cosas, a la incertidumbre que ha generado la irrupción de las nuevas tecnologías en el aula sin que los docentes ni las familias recibieran la formación adecuada. No obstante, está convencido no solo de que “va a mejorar mucho nuestra docencia y nuestra calidad de vida como docentes” sino “la perspectiva futura del aprendizaje de los alumnos” siempre y cuando “el docente sea gestor de contenidos”.
Por otra parte, subraya la necesidad de que se preste atención a la metodología, “que es lo que menos se está trabajando tanto en la formación universitaria como en la formación continua” ya que, a su juicio, “ese va a ser uno de los grandes retos del futuro”. “No sirve de nada introducir la tecnología en las aulas si no sabemos cómo usarla para que el alumno aprenda” –concluyó.
|