Manuel Gil, reconocido profesional del sector del libro, expone en su blog Antinomias Libro una serie de cuestiones que califica como absurdos en relación con la edición y el entorno digital. Gil alerta sobre la inutilidad de poner diques a la edición y de los riesgos que puede encerrar el exceso de celo en la producción digital. De sus consideraciones se desprende que basar la acción en políticas de control, además de limitar la libertad del lector y consumidor, puede ser la excusa perfecta para que muchos de ellos elijan la opción de piratear contenidos.
La reflexión de Manuel Gil surge al hilo de una situación real en la que un editor extranjero plantea un caso de conflicto frente a un editor español a raíz de encontrar disponible la edición electrónica de una obra en tiendas mexicanas y estadounidenses, obra sobre la que manifiesta tener los derechos cedidos tanto en versión impresa como en electrónica.

Reproducimos a continuación, tal y como Gil los plantea en su blog, los ocho interrogantes qu formula tras exponer el caso, en busca de posibles respuestas:
- No es hurtar al consumidor un derecho básico de elección, poder comprar la edición que considere mejor para él, sobre todo cuando se trata de dos traducciones diferentes. ¿Es razonable esto en el mundo digital?
- En uno de los países citados en la misiva el libro todavía no lo ha editado el editor que tiene los derechos territoriales, es decir, los consumidores no pueden comprar ese libro ya que no está editado en ese país en ebook, y al retirar del mercado la edición española, el consumidor no puede adquirirlo. ¿Es razonable esto en el mundo digital?
- ¿No es razonable que sea el consumidor el que elija y decida la edición a comprarse?
- ¿Pensamos Internet como algo cerrado y vallado geográficamente frente al poder de decisión del consumidor?
- ¿No favorece esto el que si el consumidor es un avezado Internauta recurra a cualquier página de enlaces para bajarse la edición aunque sea pirata?
- ¿No conlleva esto el que el avezado Internauta recurra a un emulador de IPs para adquirirlo?
- ¿Cómo es posible que el editor no deje que los libros, con traducciones diferentes, compitan entre sí?
- ¿Miedo? ¿Desconfianza en su propio producto?
Finalmente, considera el analista que levantar barreras en el entorno digital supone ir contracorriente y que finalmente serán los internautas los que dictarán sentencia al respecto. “Las barreras geográficas al usuario de internet son una rémora de los tiempos analógicos. Al menos, para mí, un absurdo absoluto.” –opina Gil.
Antinomias Libro es uno de los blogs más influyentes en torno al sector del libro, que tiene como seña de identidad una mirada penetrante de los mecanismos internos y de las variables ecoonómicas que subyacen en las noticias sobre este sector.
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