Especialistas en biblioteconomía, en educación y en las denominadas STEM (ciencia tecnología, ingeniería y matemáticas) se reunieron en Denver para debatir la forma en la que se podrían crean sinergias interesantes entre las bibliotecas y la enseñanza de estas asignaturas en los Estados Unidos.
Paul B. Dusenbery, director del Space Science Institute’s National Center for Interactive Learning (NCIL), junto con el Houston-based Lunar and Planetary Institute (LPI) organizaron en agosto una conferencia a la que asistieron ciento cincuenta expertos y en la que se fijaron los potenciales existentes en la unión de las bibliotecas con estas asignaturas.
Una de las ideas que ganó mayor fuerza durante el encuentro fue la posibilidad de crear una campaña anual de participación pública en la que se invitara a las familias a crear actividades relacionadas con las STEM en las bibliotecas, informa Linda Jacobson en un artículo publicado en School Library Journal.
Antes de la celebración de esta conferencia –indica Jacobson– se realizó una encuesta para saber lo que estaban haciendo las bibliotecas estadounidenses en dichas áreas. Según los resultados obtenidos, el ochenta por ciento de las bibliotecas desarrolla o cuenta con programas relacionados con estas asignaturas.
La encuesta también mostró que el personal de biblioteca se siente cómodo trabajando con estudiantes de primaria y secundaria, pero los principales programas relacionados con las STEM destinados a estudiantes de secundaria y adultos estaban fuera de su zona de confort.
Por esta razón, Dusenbery cree que es preciso que se generen alianzas con expertos en el tema y aclara que no se pide al bibliotecario que sea un educador, sino un facilitador que muestre a los niños y a los adultos cómo encontrar la información que desean. |