El estudio revela que el 90,7 por ciento de los niños y niñas de entre 10 y 13 años se consideran lectores en su tiempo libre, y casi todos ellos, el 84 por ciento, lo hace con una frecuencia diaria o semanal. Asimismo, en los municipios con menos de 2.000 habitantes se alcanza un 15 por ciento de préstamo bibliotecario, frente al 5,3 por ciento registrado a nivel nacional.  Los datos adquieren importancia dado el marcado carácter rural de esta Comunidad –casi la mitad de los ciudadanos residen en municipios con menos de 10.000 habitantes– y el mayor envejecimiento de la población respecto de otras.
Según María Ángeles García, el estudio, que ha sido elaborado por “la más prestigiosa institución de estudios sobre lectura a nivel nacional”, ofrece datos “alentadores y positivos”, que reflejan que “con las políticas del Gobierno regional y con todo el personal de las 548 bibliotecas y 10 bibliobuses, estamos dando los pasos para conseguir que Castilla-La Mancha sea una gran comunidad de lectores”.
El informe también pone de manifiesto que en Castilla-La Mancha un 85,9 por ciento de la población lee a partir de los 14 años. Por otra parte, recoge el papel de las bibliotecas y bibliobuses en el mantenimiento de los hábitos de lectura en el medio rural, con un porcentaje de un 15 por ciento de préstamo bibliotecario entre los habitantes de localidades menores de 2.000 habitantes, frente al 5,3 por ciento  de préstamo de la media nacional. 
Entre otros datos, cabe destacar que Guadalajara está a la cabeza del índice de lectura en la Comunidad con un 63,8 por ciento de lectores, casi diez puntos por encima de la media nacional, que la sitúa como una de las cuatro capitales de provincia españolas por encima de ese índice de lectura. 
En cuanto al papel que cumplen las bibliotecas en el fomento de la lectura, el estudio revela que de las 124 millones de visitas que tuvieron en 2009 las bibliotecas públicas españolas, 8,2 millones se registraron en las 548 bibliotecas de la región. En ese sentido Basanta subrayó que estos datos muestran que las bibliotecas son “la institución cultural más consolidada, más cercana al ciudadano y más apreciada de todas las que existen, y que además son gratuitas”.
Según los datos de 2009 ofrecidos por el informe, el 32,6 por ciento de los castellano-manchegos son socios de bibliotecas, frente al 27 por ciento a nivel nacional. Del estudio surge que el gobierno de Castilla-La Mancha invierte el doble que la media nacional por habitante en bibliotecas, 16 euros frente a los ocho a nivel nacional, y cuenta con el mayor número de personal a tiempo completo en sus bibliotecas. 
Los datos reflejan también que Castilla-La Mancha ocupa el primer nivel en habitantes por puestos de consulta; tiene la inversión en adquisiciones por cada mil habitantes más importante del conjunto de España; es la primera del conjunto español en préstamo de documentos bibliográficos no papel; y la primera comunidad en número de actividades culturales en bibliotecas en ciudades de más de 10.000 habitantes.
En cuanto a las características de los lectores, el estudio muestra que el habitante lector de Castilla-La Mancha es preferentemente mujer, y entre los lectores frecuentes, la media de tiempo dedicado a la lectura de libros durante la semana es de 5,8 horas semanales. Ese lector lee más por afición, narrativa especialmente, destacando por subgéneros la novela histórica, la intriga o misterio y las novelas de aventuras.
El 58 por ciento de la población tiene entre 21 y 200 libros en su hogar, lo que se considera como una biblioteca personal. La tasa de lectura más alta corresponde a los periódicos, seguido de los libros y revistas, y de cómics.
Respecto de los hábitos de lectura entre los 10 y 13 años, en Castilla-La Mancha, nueve de cada diez niños entre 10 y 13 años se consideran lectores, un 84 por ciento de los cuáles lo hace de forma frecuente (diaria o semanalmente) y un 6,7 por ciento es lector ocasional (alguna vez al mes o trimestre).
Entre estos datos relativos a la lectura infantil, destaca el hecho de que a ocho de cada diez niños les gustan los libros que leen.