El presidente de la Fundación, Germán Sánchez Ruipérez, reconoció que le produjo "una enorme alegría" la decisión del jurado de conceder el IV Premio Fernando Lázaro Carreter a la actriz y directora de escena Nuria Espert, ya que la institución deseaba en esta edición distinguir "a quien mejor encarnase lo más significativo de la escena española". Así lo expresó en el discurso que pronunció durante el acto de entrega del premio, que se celebró el 26 de octubre de 2011, con una comida en el hotel Palace de Madrid a la que asistieron destacadas personalidades del mundo de la cultura, la economía, la política y el periodismo.

 

El premio fue creado por la Fundación Germán Sánchez Ruipérez para contribuir a mantener viva la memoria del eminente intelectual fallecido el 4 de marzo de 2004, gran impulsor de la Real Academia Española, de la que fue su director durante siete años. Fernando Lázaro Carreter estuvo vinculado a la Fundación Germán Sánchez Ruipérez desde sus orígenes.

 

Al recoger el premio, Nuria Espert expresó que la concesión de este premio la pilló por sorpresa y aseguró que esta fue "una sorpresa muy dulce por el nombre que encabeza este premio: Fernando Lázaro Carreter. Porque, de alguna manera, este premio conserva el perfume y el recuerdo de una persona que merece que un premio como éste lleve su nombre”. Luego agradeció la distinción a la Fundación el galardón y en especial a su presidente Germán Sánchez Ruipérez porque en un mundo que tiende a los enfrentamientos “dos nombres propios que destacan: Germán Sánchez Ruipérez y Fernando Lázaro Carreter consiguen reunir en una asamblea a gente diferente que no tiene ningún problema”.

 

 

Sánchez Ruipérez recordó que en su primera convocatoria, el Premio "se orientó a la creación literaria, galardonando entonces la brillante labor de Mario Vargas Llosa; en la segunda, la reflexión y el pensamiento constituyeron el eje escogido, distinguiendo en ella a nuestro queridísimo Emilio Lledó; en la tercera, lo fue el compromiso con el idioma, tan presente en la ejemplar trayectoria de nuestro tercer premiado, Víctor García de la Concha".

 

"En esta cuarta edición –destacó–, nos pareció oportuno referirnos al mundo del teatro, que Fernando Lázaro tan profundamente amó, y al que se dedicó tanto como autor y adaptador de textos dramáticos, como en su infatigable tarea de investigador, historiador, analista y crítico sagaz".

 

Explicó que por esa razón la Fundación deseaba distinguir en esta oportunidad "a quien mejor encarnase lo más significativo de la escena española. Sentada esta premisa fundamental –dijio–, nuestro ilustre Jurado no titubeó: debía de ser Nuria Espert la persona elegida. Y así lo acordó por unanimidad".

 

Este premio, dotado con 25.000 euros y una escultura de Rafael Canogar, reconoce la aportación relevante de una persona que destaque en alguno de los ámbitos de trabajo de Fernando Lázaro Carreter: la filología, la lingüística, la docencia, la investigación, la creación y el buen uso del idioma español en los medios de comunicación. En su primera convocatoria obtuvo el premio Mario Vargas Llosa, en la segunda Emilio Lledó y en la tercera Víctor García de la Concha.

 

El jurado estuvo constituido por el presidente de la Real Academia Española, José Manuel Blecua; la historiadora y presidenta de Grupo Unidad Editorial, Carmen Iglesias; el director honorario de la Real Academia Española, Víctor García de la Concha y los académicos Ignacio Bosque y Emilio Lledó; los catedráticos Darío Villanueva yFernando Lázaro Mora; el escritor Luis Alberto de Cuenca y Felicidad Orquín, que ha actuado como secretaria en representación de la Fundación. Decidieron otorgar el Premio correspondiente al año 2011 a Nuria Espert por “su excelente trayectoria profesional y por su brillante aportación a las distintas facetas del arte dramático, méritos todos ellos que tanto apreció Fernando Lázaro Carreter en su dedicación al teatro”.

 

El su discurso, el presidente de la Fundación, Germán Sánchez Ruipérez, confesó que, al igual que le ocurrió con todos los anteriores premiados la elección de Nuria Espert produjo en él "una inmensa alegría. Porque, desde hace muchos años, admiro enormemente su labor. Su categoría. Su versatilidad. Y ese modo suyo, tan especial, de encarar su profesión, a la que, sigue entregándose, con la misma ilusión y entusiasmo de quien pareciera cada día estar iniciando su carrera; siempre en busca de nuevos caminos, de nuevos retos, feliz descubridora de insólitas vivencias y sensaciones...” Por últimom, dirigiéndose a la premiada, dijo: “Mi más sincera enhorabuena, querida Nuria. Y mi gratitud, por cuanto diariamente nos regalas. Por preservarnos de la indiferencia. De la mediocridad. Del vacío. Por renovarnos, que contigo, y con cada una de tus creaciones, la vida se nos vuelve siempre un permanente estreno”.

 

Tras las palabras de Germán Sánchez Ruipérez, intervino el director de la Real Academia Española, José Manuel Blecua, que ensalzó la carrera profesional de Nuria Espert a través de un recorrido por las vivencias personales y profesionales que más han influido a lo largo de toda su trayectoria.

 

Asistieron al acto, entre otros, S.A.R. la Infanta doña Margarita y Carlos Zurita, duques de Soria; Alberto Ruiz-Gallardón, alcalde de Madrid, Alicia Moreno, delegada del Gobierno de las Artes; Juan José Mateos, consejero de Educación de la Junta de Castilla y León; Alicia García, consejera de Cultura y Turismo de la Junta de Castilla y León; Daniel Peña, rector de la Universidad Carlos III de Madrid; José Manuel Blecua, director de la Real Academia Española; los académicos Víctor García de la Concha, Emilio Lledó y Darío Villanueva, entre otros y César Antonio Molina, exministro de Cultura y director de Casa del Lector. Además también estuvieron presentes los directores de escena José Luis Gómez, Lluis Pascual y Mario Gas.

 

 

Nace en Hospitalet de Llobregat. A los trece años ya formaba parte de la Compañía Titular Infantil del Teatro Romea de Barcelona. Ese mismo año acaba de terminar, en el Piccolo Teatro de Milán, la gira de La casa de Bernarda Alba, de Federico García Lorca, dirigida por Lluís Pasqual, donde interpretaba la Bernarda, trabajo por el que obtuvo el prestigioso Premio Valle-Inclán, concedido por la revista El Cultural, del diario El Mundo, y que se pudo ver en las Naves del Español de Matadero a finales de 2009.

 

Además de la Bernarda Alba, entre sus últimos trabajos se pueden mencionar La Celestina, de Fernando de Rojas, dirigida por el canadiense Robert Lepage; Hay que purgar a Totó (producción del Teatro Español) y Play Strindberg, junto a José Luís Gómez y Lluis Homar, ambas dirigidas por Georges Lavaudant; Arkadina, en La Gaviota de Chejov, con Josep M.ª Flotats; María Callas ,en Master Class, de T. McNally, dirigida por Mario Gas y el de Marta, en ¿Quién teme a Virginia Woolf?, junto a Adolfo Marsillach;Medea, de Eurípides, bajo la dirección de M. Cacoyannys, además de La Brisa de la Vida junto a Amparo Rivelles, dirigida por Lluís Pascual.

 

En el año 2000 realizó también una serie de recitales con los espectáculos Poemas y Canciones, en homenaje a Kurt Weill y Bertolt Brecht, y Aire y Canto, de Rafael Alberti.

 

Entre los años 1979 y 1981 fue codirectora del Centro Dramático Nacional, asumiendo la programación del Teatro María Guerrero. Más adelante, y de nuevo con su Compañía, realizó los espectáculos: Medea, de Eurípides, dirigida por Lluís Pasqual; La Tempestad, de W. Shakespeare, dirigida por J. Lavelli y Salomé, de O. Wilde, dirigida por Mario Gas.

 

Desde 1986 suma a su trabajo como actriz el de la dirección de escena, tanto en producciones de teatro como en ópera. Madama Buterfly, Elektra, Rigoletto, La Traviata, Carmen o Turandot han recorrido los más importantes foros operísticos del mundo: Liceu de Barcelona, Covent Garden, Lyric Hammersmith de Londres, Royal Theatre de Glasgow, Los Angeles Opera, La Monnaine de Bruselas, Maestranza de Sevilla, Teatro Real de Madrid y el Tokyo Opera House entre otros, compartiendo responsabilidad con directores musicales como Plácido Domingo o Zubin Metha.

 

En teatro ha dirigido a actores de la talla de Glenda Jackson, Joan Plowright (La casa de Bernarda Alba) en Londres; Irene Papas (Medea) en Barcelona o Tamasaburo Bando (Contradanza) en Tokyo.

 

Ha sido galardonada con más de ciento setenta premios de teatro y dirección en España y en el mundo entero entre los que cabe destacar, además del mencionado Premio Valle Inclán, la Medalla de Oro al Mérito de las Bellas Artes, el Premio Nacional de Interpretación, Premio BITEF de Belgrado, Premio Laurence Olivier o el Evening Standard a la mejor dirección del año en Londres y la Medalla de Oro del Gran Teatre del Liceu entre una larga lista de reconocimientos, medallas y condecoraciones. El año pasado fue investida Doctora honoris causa por la Universidad Internacional Menéndez Pelayo.