"Paga por lo que lees” en lugar de “compra primero, lee después”. Esta es la innovadora fórmula que Total Boox propone al lector, un ejemplo de las estrategias comerciales con las que algunas empresas aprovechan las oportunidades que ofrece el ecosistema del libro digital y experimentan con alternativas que pueden ir perfilando nuevos modelos de negocio en el sector editorial.
Andrew Albanese comenta la iniciativa en un artículo de Publishers Weekly, con referencia a los nuevos modos que adoptan los formatos, canales y estrategias utilizables para hacer llegar los libros a los lectores, uno de los temas recurrentes en la última edición de la conferencia anual de la Digital Book World.
La idea es sencilla. El sitio web de la compañía muestra el catálogo de libros disponibles, con las opciones estándar que ofrece cualquier tienda en línea de ebooks. Hasta ahí todo normal. La diferencia –y en ella radica la originalidad del planteamiento– es que el precio de cada libro, por así decirlo, lo establece el uso que cada usuario hace de él, pudiendo situarse entre cero y el precio total de la obra.
Al descargar un título, el cliente no paga el precio completo. Total Boox le factura en función de la porción que lee, en términos cuantitativos, de modo que si lee una cuarta parte del libro, el cargo es el veinticinco por ciento del precio asignado a la obra; si lo termina, paga el precio total y adquiere la propiedad del libro. Este modelo exige facilitar previamente al sistema los datos de una tarjeta de crédito o cuenta Paypal.
No hay problema para hojear o retomar la lectura en cualquier punto, ya que la aplicación que gestiona todo el proceso detecta y permite estas opciones de navegación dentro del ebook sin cargo adicional.
¿Qué opina la industria editorial sobre este nuevo enfoque para la venta? Según Yoav Lorch, fundador de Total Boox, la idea ha sido bien recibida. De hecho, la compañía ha firmado ya contratos con una serie de editores independientes y está en conversaciones con algunos de los grandes grupos, aunque en este caso sin formalizar aún acuerdos. Lorch está convencido de que este modelo animará a los lectores a probar y explorar más libros, y en el sector hay curiosidad por ver hasta qué punto es capaz de convertir a internautas en lectores de pago. |