El mercado del libro en Brasil se ha visto perjudicado tras la llegada de Amazon, hace tres meses, según representantes del sector, para quienes la feroz competencia por los precios puede debilitar aún más a las pequeñas librerías, que corren el riesgo de desaparecer.

 

En un artículo que publica en Folha de São Paulo, la periodista Thais Fascina señala que cuando Anmazon empezó a vender libros impresos en Brasil, se sacudió la industria editorial y se intensificó la guerra de precios entre las librerías y el comercio en línea. "El resultado –añade– es que ahora algunos títulos se imprimen a precios más bajos que las versiones digitales".

 

Para el presidente de la Associação Nacional de Livrarias (ANL), Ednílson Xavier, el gigante norteamericano "ha perjudicado, está perjudicando y perjudicará todavía más" el mercado de libros en el país.

 

"La llegada de Amazon –ha dicho– sólo ha ratificado una condición existente en Brasil desde hace mucho tiempo, que es la competencia feroz".

 

Por su parte, el especialista en el mercado editorial y fundador de PublishNews, Carlo Carrenho, ha explicado a  añade Thais Fascina que Amazon revisa los precios de todos los libros de hora en hora "y los equipara a los de cualquier sitio". En Brasil el descuento sobre los libros digitales está limitado al cinco por ciento.

 

Para Sônia Jardim, presidenta del Sindicato Nacional dos Editores de Livros (SNEL), la norma para la venta de títulos a las librerías es una sola. "Las editoriales –dice– sugieren un precio y venden a las librerías con un descuento de hasta el cincuenta por ciento. Sin embargo algunas están renunciando a parte de ese descuento para ganar más clientes".

 

Ednílson Xavier declara al periódico que la competencia inicialmente parece beneficiosa para el consumidor aunque a largo plazo no lo es. "Impide que pequeñas y medianas librerías sobrevivan y cuenten con diversidad de títulos –afirma–. Cuando el mercado se ha concentrado en manos de los grandes –asegura–, evidentemente se priorizan los títulos que tienen más circulación".

 

El director general de Amazon en Brasil, Alex Szapiro, según reseña Folha de São Paulo, ha dicho que ellos no piensan "dar la receta del pastel", cuando se le preguntó cómo es que la empresa consigue bajar tanto los precios.

 

Por su parte, Carrenho sostiene –dice el periódico– que combatir a Amazon con la política del precio fijo del libro "es una ingenuidad". En su opinión lo que hay que hacer es "mejorar los procesos del sector para que la industria sea capaz de competir".