El editor y ensayista mexicano Daniel Goldin considera que es necesario repensar el uso que se da a los recursos asignados a la educación y la cultura en general y a las bibliotecas en particular para reconocer aquellos elementos, como el capital humano, que pueden dar mucho más valor a la inversión realizada.
Goldin, que dirige la colección Ágora, dedicada a la discusión de temas relacionados con la educación y con la formación de lectores de la editorial Océano Travesía, formó parte del comité de especialistas de la "Mesa de lectura: leer y escribir hoy" organizada en Bogotá (Colombia) los días 20 y 21 de septiembre de 2012 por el Centro Regional para el Fomento del libro en América Latina y el Caribe ( Cerlalc) en el que participaron expertos iberoamericanos en lectura. (Véase Lectura Lab).
En una entrevista concedida a la Fundación, Goldin sostiene que las personas que trabajan en la cadena del libro, en la formación de lectores, deberían procurar alejarse de lugares comunes como que "hay que incrementar la inversión pública y la inversión privada en lectura", tópico sobre el que "siempre de alguna forma el sector se queja".
"Es común que nosotros digamos –señala– que es necesario que haya más bibliotecas. Sin duda es necesario que haya más bibliotecas, pero me parece que hay muchas bibliotecas tanto en las escuelas como bibliotecas públicas que podrían tener una mayor rentabilidad, podrían tener mayor valor no sólo en términos económetricos sino también en términos de los usuarios si hubiera algunos elementos que le dan valor".
Al respecto sostiene que entre esos elementos está "sobre todo la inversión en capital humano". A su entender "aquel bibliotecario que sabe acoger a la comunidad, que sabe escuchar a la comunidad, puede acompañarla, puede guiarla, puede sugerirle". Subraya que desde ese lugar es muchísimo más fácil defender la importancia la inversión porque ya se percibe el valor de los libros o de la biblioteca pública. Afirma que entonces no se trata de un valor supuesto que en la realidad para el público, para la comunidad no tiene un valor significativo. |